Francia, 1919.
Tras firmar el Tratado de Versalles, como ya sabemos, Alemania ha perdido territorios que han sido devueltos a sus países de origen, como Alsacia y Lorena a Francia, o a Dinamarca, Schleswig. Además, a Polonia le dieron parte de Prusia Occidental y se le garantizó que tendría acceso al mar Báltico, por lo que se acaba de crear el llamado «Corredor de Danzig». Esta vía de acceso a dicho mar ha dividido al imperio alemán en dos partes, separadas por 80 km.
De momento, Alemania sigue sumisa, pero la rabia se va acumulando en su interior ante las normas y los castigos impuestos. Y esto, posiblemente, tendrá repercusiones en el futuro.
Por: Estefanía Montesdeoca.
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